Zapatero

Já aqui referi o facto de politicos como Mahmoud Abbas e Abbas Hoveida terem sido acusados pelos seus inimigos de serem baha'is. Agora, pela primeira vez vejo um político europeu a ser atacado na imprensa, acusado de ser influenciado pela religião baha'i. Aconteceu há cerca de um mês, num artigo publicado no El Mundo sobre o primeiro-ministro espanhol, Jose Luis Zapatero. Seguem-se os excertos que mais relevantes do artigo intitulado "Zapatero, a Fé Baha'i e as Vaidades Autonómicas".

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Y es que en el mundo virtual de Zapatero cabe todo tipo de ejercicios en el alambre. Me dice un experto en religiones monoteístas que la fuente de inspiración de nuestro excelso presidente es el movimiento Bahaí, nacido en 1844 y, según World Christian Encyclopedia, the youngest of the world's independent religions, con presencia en más de 230 países. La idea central de la fe Bahaí es que la Humanidad es una sola raza y que ha llegado el día de su unificación en una sociedad global (de manera que ni Pettit ni historias, querido Pedrojota: el rastro a seguir se llama Bahá'u'lláh (1817-1892), échale un galgo, un profeta a la altura de Cristo o Mahoma, dicen sus fieles, idea que te brindo para una de tus magníficas homilías dominicales. (De nada). Dice Bahá'u'lláh que Dios ha puesto en marcha fuerzas históricas llamadas a derribar cualquier barrera de raza, clase, credo y nación, fuerzas que con el tiempo crearán una civilización universal. Me cuentan también que Kofi Annan es seguidor del ideario Bahaí, y que la Alianza de Civilizaciones es la piedra angular sobre la que Kakofi y ZP van a construir la catedral armoniosa de esa sociedad global enseñoreada por la paz y la igualdad universal. Desde este punto de vista, que Cataluña sea nación no pasaría de ser un detalle exótico. Lo dicho, café para todos y que siga la fiesta.

El primer mandamiento de la fe Bahaí es «el abandono de toda forma de prejuicio», principio que Zapatero sigue a rajatabla.Por eso ahora dice que la OPA de Gas Natural sobre Endesa es «un asunto de dos empresas privadas». Por desgracia para él, una mayoría del pleno de la Sala Tercera del Tribunal Supremo no ha entendido la auténtica dimensión de lo Bahaí, lo que explica que el viernes decidiera suspender el acuerdo del Consejo de Ministros que autorizó la OPA hostil de la gasista. Que la Justicia le diga al Gobierno «tengo muy serias dudas acerca de la legalidad del acuerdo adoptado por ustedes» es un tan duro como insólito varapalo al Ejecutivo, y la práctica condena a muerte de esta malhadada OPA que mucha gente juiciosa, en Madrid y Barcelona, desearía ver retirada para dar paso a una reordenación del sector sobre bases de eficacia y talento (sobra en la Caixa, cuando no se escucha el tamtan de Moncloa), donde prime el protagonismo negociador de los empresarios y no el intervencionismo atroz de un Gobierno que debería dedicarse a lo suyo: a seguir tocando el violón de esa genial idea llamada Alianza de Civilizaciones.
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